Un maratón por semana: mi nuevo meta para 2025 😯
Por: Alejandro Ortiz Tapia
¿Qué onda wey?
Ya hace rato que no tenia nada que escribir y pues han pasado un chingo montón de cosas que me han hecho envejecer como 10 años en las últimas semanas, pero ahora aprecio mucho poderme sentar y escribir sobre mis hobbies, ¿que afortunado es eso? Muchos de los problemas se han resuelto poco a poco y ahora puedo pensar en mis planes para correr en este año.
Después de correr un maratón en 2023 y dos más en 2024, alcancé un hito personal: 20 maratones en total. Durante los últimos años, mi entrenamiento ha girado en torno a un calendario de competencias, con planes estructurados y semanas intensas enfocadas en la siguiente gran carrera. Pero este año comenzó un poco diferente con cambios personales importantes.
Para 2025, decidí hacer algo inusual: no tengo ninguna carrera programada. No hay maratones en el horizonte, ni planes de entrenamiento que dicten mis semanas. Y en lugar de reducir la cantidad de kilómetros, me propuse un reto que sonaba como clickbait a la hora de escribir este post: correr un maratón por semana.
¿Qué significa realmente correr un maratón por semana?
No significa que esté corriendo 42.2 km de un solo golpe cada siete días (aunque sería un reto interesante). En su lugar, la idea es acumular la distancia de un maratón a lo largo de la semana. Pueden ser varios rodajes cortos, uno o dos largos, o cualquier combinación que me ayude a alcanzar el objetivo sin sobrecargarme.
Este enfoque tiene varios beneficios:
✅ Flexibilidad: Puedo distribuir los kilómetros según cómo me sienta cada semana.
✅ Menos presión: Sin una carrera en el calendario, corro por gusto, no por obligación.
✅ Mantenimiento sin desgaste: Sigo sumando volumen sin la fatiga extrema del entrenamiento para un maratón específico.
¿Cómo van las primeras semanas?
Al principio, mi mente todavía estaba en modo “plan de entrenamiento”. Buscaba seguir una estructura fija, pero poco a poco me di cuenta de que la clave de este reto es la adaptabilidad. Algunas semanas me siento bien y hago un par de tiradas largas, otras semanas divido la distancia en más sesiones cortas.
También he aprendido que el descanso es parte del plan. No se trata de sumar kilómetros por sumar, sino de encontrar un balance entre mantenerme activo y evitar el agotamiento.
¿Y después?
No sé cuánto tiempo mantendré este reto. Quizás en unos meses sienta la necesidad de volver a competir, o tal vez disfrute tanto esta rutina que decida extenderla por todo el año. Por ahora, lo tomo semana a semana, maratón a maratón.
Correr sin una meta de competencia me ha recordado por qué empecé a correr en primer lugar: por el simple hecho de disfrutarlo. Y, al final del día, eso es lo único que realmente importa.
¿Alguna vez has intentado un reto de este tipo? ¿Cómo organizas tu entrenamiento cuando no tienes una carrera en el horizonte? ¡Déjamelo en los comentarios!
¡No olviden salir a correr! 🏃🏻♂️💨